Experiencias con corazón: ideas para sorprender en el Día de la Madre

El Día de la Madre es una oportunidad perfecta para rendir homenaje con gestos cargados de significado. Cada vez más personas eligen regalos que priorizan el tiempo compartido, las emociones y los recuerdos que perduran. Cuáles son las tendencias para el próximo 19 de octubre.

En Argentina, el Día de la Madre se celebra cada tercer domingo de octubre, una fecha que, más allá de los regalos y las reuniones familiares, tiene un profundo origen histórico. La elección se remonta a 1931, cuando el calendario litúrgico católico instituyó en este mes la festividad de la “Divina Maternidad de María”. Desde entonces, esta tradición se mantiene viva y este año la conmemoración será el domingo 19 de octubre.

En los últimos años, además, esta fecha se consolidó como una oportunidad ideal para regalar experiencias con significado, que vayan más allá de los obsequios materiales. Desde escapadas de fin de semana y rituales de bienestar como un dia de spa, hasta propuestas gastronómicas especiales o actividades compartidas, cada vez más familias eligen homenajes que priorizan el tiempo de calidad y las emociones compartidas.

Al mismo tiempo, crece la tendencia de elegir regalos que despierten la nostalgia y evoquen momentos de la niñez. Sabores familiares, aromas que remiten al hogar o gestos simples pero cargados de significado se convierten en protagonistas de esta fecha. Panes caseros, postres tradicionales o pequeños detalles artesanales pueden transformar un presente en un puente emocional con la historia compartida entre madres e hijos.

Opciones para regalarle a mamá
Una propuesta que gana terreno son las experiencias gastronómicas especiales, ideales para las madres que disfrutan de la buena mesa. Una opción original es optar por las cajas temáticas, tanto para el desayuno como para la hora del té. Con un poco de imaginación se pueden preparar fácilmente, incluir opciones dulces o saladas, e, incluso, sumar tazas o platos que quedan de recuerdo.

“El valor emocional de este tipo de regalos radica en su capacidad para transportarnos al pasado. Regalar dulces a mamá no solo es una forma de endulzar su día, sino también de devolverle un poco de ese amor que ella nos brindó en cada comida. La nostalgia juega un papel fundamental en esta elección: los budines, la torta de manzana, o incluso un clásico alfajor artesanal se transforman en símbolos de cariño”, recomienda Sofía Mallaviabarrena, Regional Marketing Manager de Puratos.

En ese sentido, la tendencia actual en la pastelería refleja esta combinación de tradición e innovación. Según el estudio Taste Tomorrow que Puratos elabora en más de 50 países del mundo, los consumidores buscan nuevas experiencias, pero sin alejarse demasiado de lo conocido. Así, los dulces clásicos en presentaciones modernas son una opción segura para aquellos que desean regalar algo que sorprenda sin perder la familiaridad.

“Más allá de la opción elegida, lo importante es que el regalo refleje afecto genuino y tenga un valor emocional”, menciona Mallaviabarrena. El Día de la Madre es una ocasión especial para agradecer, recordar y compartir, y las experiencias permiten que ese homenaje se convierta en un momento único y perdurable.