El Día Mundial de las “Papas Belgas”: 3 datos curiosos sobre está imperdible tradición y por qué no debes dejar de probarlas

Este 1º de agosto se celebra el ¨Día Mundial de las Papas Belgas¨, un plato cuya receta deleita a los comensales con su perfecta combinación de sencillez y sabor único.  Y para celebrarlo, Le Blé presenta su irresistible receta.

Cada 1º de agosto se celebra el Día Mundial de las Papas Belgas, ese plato que reafirma el valor que tiene el confort de la simpleza en armonía. Por ello, Le Blé presenta una irresistible receta que tiene un beneficio exclusivo que permite servir esas patatas cremosas por dentro y crujientes y doradas por fuera.

3 CURIOSIDADES SOBRE LAS PALPAS BELGAS, Y POR QUÉ NO DEBES DEJAR DE PROBARLAS

EL NACIMIENTO DE UN PLATO POPULAR. Denominadas originalmente como les frites belges, el origen de las papas belgas puede ser rastreado al siglo XIX en las zonas costeras de Francia y Bélgica, puntos neurálgicos de una larga “competencia” entre países que aseguran haber descubierto, en un principio, las patatas fritas. Por tratarse de una receta marcada por la austeridad, las papas belgas se convirtieron rápidamente en una de las opciones más requeridas por los comensales que buscaban degustar de un plato exquisito, pero que también fuera posible de preparar con premura en caso de que la ocasión así lo ameritara.

ROMPIENDO CON LA TRADICIÓN. Toda revolución gastronómica surge de una necesidad de tomar modelos preexistentes para introducir cambios novedosos para poder innovar incluso en los más pequeños detalles. Eso fue precisamente lo que sucedió con las papas belgas, herederas de las papas fritas, sin embargo, diferentes en su tamaño. La posibilidad de poder cortar las papas en bloques más grandes pudo haber sido una simple transformación. Sin embargo, fue de esa leve metamorfosis de dónde surgió el encanto de este plato que obtuvo merecidamente un nombre propio, una inapelable identidad.

EN EL PROCESO DE FRITURA ESTÁ LA CLAVE DEL ÉXITO. Cortar las papas en tiras de mayor grosor no es el único secreto para que la preparación llegue a buen puerto, ya que el broche de oro se obtiene mediante el momento de la fritura en el que no hay que saltearse un importante paso. Además de la siempre significativa elección del aceite que se utilizará en la cocción, nunca hay que descuidar el doble proceso que conlleva. Para que las papas belgas puedan adquirir esa textura crujiente y ese color dorado que son sus marcas registradas, siempre deben ser freídas en dos ocasiones, un dato fundamental para que el plato pueda, desde la actualidad, dialogar con sus orígenes.

¿POR QUÉ SE CELEBRA EL DÍA DE LAS PAPAS BELGAS?

En base a esta cuestión surge una gran disputa por si las papas fritas son en verdad francesas o belgas, y es algo que aún no tiene respuesta. Puede que nunca sepamos con certeza el origen de las ‘frites’, pero lo que está claro es que se han ganado un gran reconocimiento como emblema gastronómico belga por lo que tienen de especial. Y ahí reside su secreto, en su elaboración, que da como resultado patatas crujientes, doradas, y cremosas por dentro.

¿CÓMO LOGRAR LAS MEJORES PAPAS BELGAS? LE BLÉ REVELA LA CLAVE DE ÉXITO DE SU RECETA

Después de lavarlas, secarlas y cortarlas, se fríen hasta que comiencen a flotar, se sacan y las dejamos reposar para volverlas a freír una segunda vez a una temperatura un poco más alta. Ese es el secreto recomendado de Le Blé para lograr queden con un sabor exquisito y una textura única.

Vos también podés hacerle honor a la tradición de este plato, ya sea siguiendo la receta e imprimiéndole tu inconfundible sello o bien disfrutándolo

en alguno de los locales de Le Blé

¡No te pierdas de celebrar el 1º de agosto el ¨Día Mundial de las Papas Belgas¨!